Si hay algo que fascina a los niños pequeños, es ver cómo dos imanes se atraen o se repelen sin tocarse. Esa pequeña “magia” invisible despierta su curiosidad, su pensamiento lógico y su creatividad. Por eso, las manualidades con imanes son una de las actividades más completas y divertidas para hacer en casa o en el aula.
Además de entretenerlos, estimulan el lenguaje, la concentración y la coordinación fina, ya que implican observar, experimentar y manipular objetos con intención.
¿Por qué hacer manualidades con imanes?
Los imanes son ideales para introducir conceptos científicos de forma muy sencilla: fuerza, polaridad, atracción… pero también para trabajar valores Montessori como la observación, la autonomía y el aprendizaje por descubrimiento.
Con actividades simples, los peques pueden explorar materiales, clasificar objetos según si son magnéticos o no, y usar los imanes como parte de juegos creativos.
Y lo mejor: ¡se pueden adaptar a cualquier edad! Desde niños de 2-3 años hasta pequeños de primaria.
Adéntrate en el mundo de las manualidades con imanes y diviértete creando tus propios materiales para el aprendizaje de los peques.
Consejos de seguridad y materiales
Siempre supervisa el uso de imanes, especialmente si son pequeños. Asegúrate de que los imanes estén bien sujetos y no puedan tragarse.
Usa imanes de buena calidad y resistentes, sobre todo si los vas a reutilizar para varios proyectos.
La versatilidad de los imanes de neodimio, por ejemplo, son una excelente opción por su fuerza, te permitirán hacer muchas actividades matemáticas o creativas ya que permiten hacer todo tipo de construcciones. Permiten crear proyectos duraderos y más potentes, ideales para actividades STEM o Montessori caseras.
5 ideas de manualidades con imanes para hacer en casa
Aquí tienes algunas actividades fáciles y seguras que puedes preparar con materiales básicos:
1. Pesca magnética casera
Corta peces de cartón, pégalos sobre goma eva y añade un clip metálico. Con una caña hecha con un palo y un imán, tu peque podrá “pescar” todos los peces del mar.
2. Carreras de coches magnéticos
Dibuja un circuito sobre una cartulina. Pega un imán pequeño debajo de un coche de juguete y otro bajo una pajita o palito que sirva para moverlo sin tocarlo. ¡Perfecto para desarrollar la motricidad!
3. Marionetas que se mueven con imanes
Dibuja personajes en cartón, pégalos sobre palitos y añade un imán en la parte inferior. Desde debajo de la mesa, mueve otro imán y verás cómo se desplazan “solos”.
4. Clasificar objetos magnéticos
Una actividad sensorial ideal para niños pequeños. Junta distintos objetos (clips, tapones, monedas, trozos de plástico, etc.) y deja que tu hijo descubra cuáles se atraen y cuáles no.
5. Pintura mágica
Coloca un papel sobre una bandeja metálica. Pega un clip en una bolita de algodón y muévela con un imán por debajo. Puedes mojarla en pintura y dejar que el niño cree dibujos abstractos.
Matemáticas con imanes
Los imanes despiertan curiosidad y son perfectos para trabajar conceptos como conteo, clasificación, correspondencia o patrones, porque los peques pueden experimentar, mover piezas y ver resultados inmediatos.
Cuando los niños manipulan objetos, su cerebro entiende los números como algo real y tangible, no como símbolos abstractos. Los imanes permiten que las actividades sean dinámicas, visuales y, sobre todo, ¡atractivas!
5 actividades de matemáticas con imanes
1. Números magnéticos en la nevera
Coloca números magnéticos grandes en el frigorífico o una pizarra metálica.
Pide a tu peque que los ordene del 1 al 10, que encuentre “el número que falta” o que agrupe los pares e impares.
Es una forma natural de introducir el concepto de secuencia numérica.
2. Pesca de números
Recorta peces de cartulina con números del 1 al 10, ponles un clip y prepara una caña con hilo, palo e imán.
Cuando pesque uno, pídele que diga el número en voz alta o que haga una acción: “¡Has pescado el 3! Da tres saltitos.”
Así trabajas asociación número-cantidad y motricidad.
3. Sumas magnéticas
Usa tapones o piedritas metálicas (o añade un clip a cada una). Coloca una bandeja de metal y pide que el niño haga “sumas visuales”: junta 2 + 3 y cuéntalas.
Puedes escribir la operación en una tarjeta: “2 + 3 = ?” y que el imán “atraiga” el número correcto.
4. Clasificar y contar con imanes de colores
Utiliza imanes de colores (o añade imanes pequeños detrás de botones o tapones pintados).
Crea una tabla sencilla y pide que los clasifique: por color, por tamaño, o por cantidad.
Por ejemplo: “¿Cuántos imanes rojos hay? ¿Y azules?”
Trabajarás agrupación, conteo y comparación.
5.Series y patrones magnéticos
En una superficie metálica, forma una secuencia: rojo-azul-rojo-azul…
Pide a tu peque que adivine qué viene después.
Cuando domine el patrón, ¡puede crear los suyos!
Ideal para trabajar anticipación, lógica y memoria visual.
Nivel extra: imanes y geometría
A medida que crecen, puedes usar imanes neodominio y figuras metálicas para construir formas geométricas o cuerpos en 3D.
Por ejemplo, unir triángulos y cuadrados para crear cubos, pirámides o casas.
Esto refuerza la comprensión espacial y el pensamiento científico desde pequeños.
Trucos prácticos
- Organiza una caja magnética: guarda todos los materiales juntos para no perder imanes.
- Hazlo breve pero constante: 10-15 minutos diarios bastan para afianzar conceptos según la actividad que estés haciendo, orden, matemáticas, lenguaje, etc, y siempre teniendo en cuenta la edad del peque.
- Combina con arte: deja que pinte los números o los peces antes de jugar.
- Convierte el juego en reto: haz fotos de los resultados y crea un mural de progresos.
Las manualidades con imanes no solo entretienen:
- Fomentan la curiosidad natural de los niños.
- Desarrollan la coordinación mano-ojo.
- Promueven la autonomía, el razonamiento lógico y la resolución de problemas.
- Refuerzan la atención y concentración.
- Son reutilizables y fáciles de adaptar según la edad.
Con un poco de creatividad (y algunos imanes), puedes convertir una tarde cualquiera en una experiencia llena de descubrimientos y risas.
Si te gustan este tipo de actividades, puedes visitar el post sobre manualidades para niños de 2 a 3 años, donde encontrarás más ideas de aprendizaje activo para acompañar cada experiencia.
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