Los puzzles son ese clásico juego que todo el mundo conoce. Todo el mundo ha hecho uno en algún momento de su vida, incluso hay gente que los colecciona. Para los niños hacer puzzles es algo súper beneficioso por todo lo que desarrollan y lo que trabajan al hacerlos. Vamos a ver qué beneficios tiene montar puzzles para un peque, que habilidades se desarrollan, que tipos de rompecabezas hay y cuales son los más adecuados según edad. Esta guía te será muy útil a la hora de regalar un puzzle a los más peques de la familia.
Beneficios de hacer puzzles
Ayuda al desarrollo motriz
Es muy importante para un peque desarrollar sobretodo la motricidad fina y tener un buen control de la pinza desde que son bebés, esto hará que después les sea más fácil coger el lápiz. Encajar la pieza en el sitio correcto requiere de mucho esfuerzo y habilidad a nivel motriz algo que solo se conseguirá practicando de forma repetitiva.
Practican la concentración y la paciencia
En los más peques el hecho de repetir para encajar bien la pieza les ayudará a concentrarse y los tendrá bastante entretenidos. No lo encajarán bien a la primera, pero con la práctica lo conseguirán. Un puzzle obliga al peque a estar concentrado en una sola cosa. Para los niños mayores a medida que aumenta la dificultad también tendrá que ir aumentando la paciencia ya que serán muchas más piezas las que tendrán que colocar.
Cada vez serán más pequeñas e incluso muy parecidas en color, así que el nivel de concentración y de paciencia irá aumentando a la par que lo hace la dificultad del puzzle. Si quieren ver terminado el puzzle tendrán que regular la frustración de no encontrar una pieza en concreto e ir probando hasta encontrar la que es.
Estimulan la visión espacial
Tener que encontrar las piezas según su forma y color para poder colocarla en el lugar correcto ayuda a potenciar la visión espacial. El cerebro es capaz de memorizarla y colocarla en el lugar que va incluso cuando la ve del revés. Esto hace que el niño sea capaz de reconocer la pieza correcta de entre la multitud de piezas que haya sobre la mesa.
Aprenden conceptos
Con los puzzles los más pequeños aprenden conceptos educativos como los colores, las formas, animales, números, letras, etc y además estimularás el lenguaje de tu peque. Y para los más mayores existen puzzles de monumentos, lugares, mapas, cuadros etc donde aprenderán geografía, cultura, etc. Aprenden de forma divertida a través del juego.
Mejora su autoestima
Hacer un puzzle supone un gran reto, el hecho de terminarlo es algo que les va aportar un sentimiento de felicidad que hace que su autoestima aumente. Han sido capaces de acabar el puzzle por ellos mismos. Al principio es importante acompañarles mientras hacen el puzzle para ayudarles a gestionar la frustración que pueda surgir, pero una vez terminado, la satisfacción es plena.
Aprenden a planificarse y generar una estrategia
Para armar un puzzle tendrán que planificar como lo harán. Que estrategia van a seguir para empezar y terminar el puzzle con éxito. Algunos peques empiezan por las esquinas y de ahí van haciendo el borde, otros ordenan por colores y van haciendo por grupos de color, cada uno su estrategia. Lo mejor es dejarles que busquen su propia estrategia, puedes ayudar pero no les obligues a hacerlo como lo haces tú, perderías la oportunidad de ver como se desenvuelven en la resolución de problemas.
Mejora las relaciones sociales
Siempre que se pueda, es mejor hacer el puzzle en familia o con amigos. Intenta que hacer un puzzle no se convierta en un juego solitario. Se fomenta el trabajo en grupo y se gana tiempo de calidad en familia. Solo hay que tener en cuenta que tipo de puzzles le gustan y que sea acorde a su edad o capacidad para evitar un rechazo o frustración.
Qué se trabaja con los rompecabezas
Otro de los beneficios de hacer puzzles son las 4 habilidades que se potencian muchísimo cuando los peques montan rompecabezas. Es muy importante desarrollar estas habilidades durante su crecimiento.
- La coordinación óculo-manual. Esta es una habilidad cognitiva en la que hace falta que el ojo y la mano trabajen juntos para realizar una actividad, como en este caso es el montar un rompecabezas.
- El pensamiento lógico. Es una habilidad que si la desarrollan y practican desde chuiquitines les ayudará con las Matemáticas. Un puzzle es la mejor herramienta para potenciarla de manera divertida y sin darse cuenta de lo que están interiorizando.
- La creatividad. Existen muchas actividades para desarrollar la creatividad y los puzzles son una más. El hecho de tener que pensar una y otra vez que ficha es la que tiene que colocar y tener que imaginar que dibujo desvela para poder colocarla en el lugar donde encaja, es una forma de poner en marcha la imaginación. En el caso de un rompecabezas, para poder ver con claridad, primero tiene que imaginar.
- La capacidad de análisis y síntesis. Los rompecabezas les ayudan a sintetizar la información pasando de los más genérico a lo más concreto. Por ejemplo, ven la imagen del puzzle en su totalidad, sin embargo para completarlo deberán encontrar una pieza en concreto con un color, línea o figura determinada que será clave para poder continuar el rompecabezas y así poder terminarlo.
Cómo elegir los puzzles según edad del peque
Para obtener todos los beneficios de hacer puzzles, es muy importante elegir el puzzle adecuado según la edad de nuestro peque, por eso te he hecho esta guía con la que seguro acertarás en tu elección.
De 1 a 2 años
- Elige puzzles de madera o magnéticos.
- Piezas grandes que puedan coger con sus pequeñas manitas y a ser posible con botón para que puedan practicar la motricidad fina.
- Los que tiene animales o formas geométricas triunfan muchísimo y además los podrás usar para estimular el habla.
- Elige los que tienen entre 2 y 6 piezas, más de 6 piezas les abrumará.
- Es importante sentarse con ellos y que vean como se hacen y así adentrarles en el maravilloso mundo de los rompecabezas.
De 2 a 3 años
- Puzzles de madera, plástico o cartón duro
- Piezas grandes igualmente
- A poder ser con imágenes reales o ilustraciones realistas. En Montessori la fantasía es algo que se empieza a mostrar a partir de los 6 años que es donde el cerebro del niño está mejor preparado para distinguir la realidad de la ficción. Esto quiere decir que mejor escoger ilustraciones de animales que estén pintados con el color que real y no por ejemplo un elefante de color rosa.
- El número de piezas ideal para esta edad es a partir de 4 fichas hasta no más de 12.
De 3 a 4 años
- Puzzles con piezas grandes
- De 10 a 24 piezas
- Y ya se pueden introducir rompecabezas con letras o palabras y adentrarles en el mundo del alfabeto y la escritura a través de los puzzles. También con escenas cotidianas como la casa o el parque, personas, oficios. En definitiva con imágenes un poco más complejas que cuando eran más pequeños, pero que siga siendo simple y fácilmente reconocible.
De 4 a 5 años
- A partir de esta edad tenemos que tener en cuenta la habilidad de nuestro peque haciendo puzzles.
- En función de su habilidad podemos elegir rompecabezas de entre 24 y 48 fichas
- Preferiblemente continuar con imágenes reales o ilustraciones coherentes con la vida real y dejar la fantasía para la siguiente franja de edad. En esta etapa todavía están percibiendo su entorno y el mundo tal y como es y no son capaces de distinguir fantasía de realidad. Todo lo que sus ojos perciben su cerebro lo interpretará como que existe. Es la etapa en la que se crean falsas ilusiones pensando que los unicornios son reales o desarrollan miedo porque creen que los monstruos existen. Pero si tienen algún personaje favorito como Mickey Mouse o la patrulla canina, también les resultará motivador terminar un puzzle de su personaje.
De 5 a 7 años
- Con 5 años ya están listos para hacer los puzzles que hacemos los adultos con piezas más pequeñas.
- Podemos introducir todo tipo de temáticas con imágenes reales o de fantasía. Puzzles que al terminarlos cuenten una historia y deje volar la imaginación. Lugares del mundo, piratas, hadas, dragones, castillos, unicornios, etc
- Los que están más acostumbrados a montar rompecabezas y pueden realizar puzzles de 50 piezas o más. Ten en cuenta si tu peque ya ha hecho muchos puzzles, nivel de paciencia y frustración que tiene para ir aumentado el número de piezas progresivamente. No le pongas un puzzle de 150 piezas y con muchos detalles si tiene un nivel de frustración muy alto. Primero se trabajará esa frustración para ir aumentando la dificultad.
A partir de 7 años
- Pueden terminar puzzles de 200 piezas y más. Eso sí, aquí es importante hacerles saber que no es necesario acabarlo el mismo día. Aquí practicarán la paciencia de forma extrema, ya que dependiendo de la personalidad de tu peque, dejar un puzzle a medias puede ser muy desafiante.
- Las imágenes de postales y con mucho detalle serán la diversión de toda la familia, suponiendo un gran reto para todos, sin embargo la satisfacción una vez acabado será mayor.
A partir de 10 años
A esta edad pueden hacer todo tipo de puzzles y empieza a ser muy interesante para ellos los puzzles en 3D
Como ves hay muchos tipos de puzzles, de distintos materiales, incluso personalizables como los de Regala un Puzzle. No se me ocurre mejor manera de ofrecer rompecabezas con imágenes reales a los peques transformando una fotografía en un puzzle. Con esta súper guía seguro que tienes mucho más claro que tipo de puzzle comprar a un peque, y no olvides tener en cuenta sus gustos y preferencias para que el juego tenga éxito.
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Mi hijo tiene 22 y todavía tengo guardados los que creo desde chiquito. Hoy en día estudia en la universidad matemáticas. Esto los ayuda muchísimo.
Gracias, me alegra que te haya gustado y te sirva de ayuda. Un saludo
¡Enhorabuena por el articulo! Es super completo. A mis hijas les encantan hacer puzzles, y creo que es super beneficioso para su mente.